La violencia de género y el maltrato a los mayores es una violación de los derechos humanos
Detectar de forma temprana el problema y abordarlo desde una perspectiva multidisciplinar, tanto en lo físico, como en lo emocional y en lo social; son algunas de las reflexiones que se han expuesto durante la 1ª Jornada Hispano-Lusa para la prevención de la violencia de género y del maltrato a las personas mayores. Organizada por el Instituto de la Mujer de Extremadura (IMEX) y la Consejería de Sanidad de Políticas Sociales de la Junta de Extremadura, ha contado con la colaboración de la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología (SEGG) y de la Sociedade Portuguesa de Geriatria e Gerontologia (SPGG). La jornada, celebrada en el Salón Guadiana del Hospital Infanta Cristina de Badajoz, fue inaugurada por el presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara. En su intervención consideró necesario buscar, desde la especialización, soluciones a los casos de violencia de género que se producen con las personas mayores. El encuentro, que reunió a más de 150 participantes, estuvo dirigido a profesionales sociosanitarios, profesionales del trabajo social, terapeutas ocupacionales, personal de los cuerpos policiales, estudiantes de pregrado… La jornada contó con la participación de +magín en labores de producción y coordinación técnica.
CONCLUSIONES
En la clausura, la directora general del IMEX, Elisa Barrientos, tras destacar la importancia de la colaboración público-privada en este ámbito, confirmó que la segunda edición se realizará el año que viene en Évora. También reflexionó sobre el hecho de que, a pesar de que existe más concienciación social contra el maltrato y la violencia de género, igual no se están dando herramientas para saber cómo actuar de forma adecuada, apuntando que igual hay que hablar más de lo que son relaciones sanas y el buen trato.
Previamente, la doctora Montaña Román García, médica geriatra y vocal en Extremadura en la SEGG, expuso algunas de las conclusiones que podían extraerse de lo dicho y tratado en la jornada. Entre ellas destacó la conveniencia de visibilizar el problema y aunar esfuerzos para desarrollar estrategias de formación, información y sensibilización, basándose no solo en la implicación de los profesionales, sino también de la sociedad, la familia, los cuidadores y, muy importante, de los jóvenes y los niños.También señaló la necesaria implicación de las sociedades científicas, dando mucha importancia a la colaboración con otros países, como el vecino Portugal.
Tras referirse a la importancia de disponer de datos fiables, indicó que la jornada era una oportunidad para el compromiso de las administraciones, y que es necesario promover acciones transversales basadas en la calidad y la regulación de los indicadores de calidad. Otro aspecto que destacó, a modo de conclusión, es que hay que fomentar la autonomía, el empoderamiento, de la persona mayor. El problema del maltrato -afirmó- no se puede abordar desde una perspectiva unilateral, sino en equipo, y teniendo muy en cuenta el análisis profundo de cada caso en particular, los cursos de atención, aplicando aquél que menos lesione a la persona y a la familia.